*Alrededor de las aguas cristalinas de la Laguna de Nogales, senderos y leyendas de la región montañosa central de Veracruz; un sitio ideal para apartarse del bullicio de las ciudades
Miguel Ángel Contreras Mauss
Córdoba, Ver.- Sus aguas cristalinas color esmeralda son el distintivo. La vegetación que le rodea convierte al sitio en un espacio ideal para descansar y alejarse del bullicio de las ciudades.
Las frías aguas de la Laguna de Nogales, provenientes de los glaciares del Volcán Pico de Orizaba, jamás impiden disfrutar de la belleza natural enclavada en las montañas de Veracruz.
Los senderos conducen a bellos rincones naturales como la Cueva de las Hadas, llamada así porque los lugareños aseguran que es el hogar de algunos seres místicos.
Son sus aguas cristalinas las que permiten observar el subsuelo de la laguna que en algunas partes asoma piedras de río y en otras, vegetación.
En el recorrido por los senderos puedes ir observando la naturaleza que rodea el sitio, además de las aves y animales silvestres.
Los visitantes pueden nadar en el sitio, aunque también pasean por las lanchas que los propios ciudadanos han construido.
Desde la época de la Conquista, Nogales está rodeado de leyendas sobrenaturales. Cuentan que aquí se casaron Hernán Cortés y la Malinche, por lo que este municipio es considerado la cuna del mestizaje.
Además, en sus entrañas se encuentra la casa del Nahual, un ser místico mitad hombre y mitad animal que protegió este manantial de la construcción de las vías férreas.
